En Guillén, queremos compartir con vosotros la historia de toda una vida dedicada a la carne. Somos carniceros de corazón y estamos orgullosos de nuestra profesión.

Desde muy jóvenes, hemos trabajado arduamente para perfeccionar nuestras habilidades y conocimientos en el mundo de la carne. Cada día, nos esforzamos por ofrecer los mejores cortes, garantizando la calidad y frescura que nuestros clientes merecen.

Nuestra pasión por la carne va más allá de solo vender productos. Nos enorgullece ser parte de una tradición que ha pasado de generación en generación. Hemos aprendido de nuestros padres y abuelos, y ahora transmitimos ese conocimiento a nuestros propios hijos.

Cada corte que preparamos es un reflejo de nuestro esfuerzo y dedicación. Nos aseguramos de seleccionar cuidadosamente cada pieza, buscando siempre la mejor calidad.

Agradecemos a todos nuestros clientes por confiar en nosotros y por ser parte de nuestra historia. Seguiremos esforzándonos para ofrecerles lo mejor de la carne y superar sus expectativas.